Crítica:Cuando el polvo se asienta
Su fuerza reside en dividirnos, en enfrentarnos. En hacer que odio crezca en nosotros. Nada justifica un atentando. Nada justifica hacer que alguien sienta el terrible dolor que supone una perdida y mas si esta es violenta e inesperada. Las familias de las víctimas quedan marcadas de por vida. La de los supervivientes también. Un cúmulo de sentimientos a los que muchas veces es difícil enfrentarse si no es con la ayuda de los demás. Aflicción, pena, tristeza e incluso culpa por haber sobrevivido, por haber sido la persona que decidió ir al lugar donde sucedieron esos terribles acontecimientos.
Siempre se intenta buscar una explicación. Siempre se intenta saber que llevó a una o varias personas para provocar un tiroteo contra un grupo de gente acabando con sus vidas. Intentar entender que lleva a alguien a provocar un atentando para así poder evitar que suceda de nuevo. A las preguntas planteadas no siempre se les encuentra respuesta y a veces estas no son las que queremos escuchar.
'Cuando el polvo se asienta' ('Når støvet har lagt sig') habla de las víctimas. De como eran antes y de como un atentando les cambia las vidas, de como han de seguir adelante a pesar de las profundas heridas, no siempre físicas, que arrastran. La serie dirigida por Milad Alami, Iram Haq y Jeanette Nordahl se toma su tiempo para dar a conocer a sus protagonistas, a esos ocho personajes que van a acompañar al espectador durante los diez episodios que dura la serie. Diferentes estratos sociales, diferentes etnias. Como nosotros todos arrastran cargas, todos llevan encima un pesado cargamento por enfrentarse a una vida que no es sencilla, por intentar superar diversos problemas que no son ajenos al espectador. Los protagonistas de 'Cuando el polvo se asienta' ('Når støvet har lagt sig') son personas normales. Podemos ser tú o yo. Cualquiera de nosotros podríamos ser los protagonistas. El destino lo marca el azar. Una moneda tirada al aire.
Me quedo con la relación que se establece entre Ginger (Katinka Laerke Petersen) y Holger (Henning Jensen), con la manera en la que Arian Kashef hace que la fragilidad y la culpa con la que carga Jamal resulte creíble, con la imponente presencia de Lotte Andersen, con la forma en la que evoluciona Nikolaj (Peter Christoffersen), por como puede encontrar algo de empatía en el egoísmo en el que parece ahogarse. Me quede con todos y cada uno de los personajes. Porque todos tienen algo que aportar, todos tienen un punto de vista propia que hace que esta serie sea rica en matices. Pero sobre todo me quedo con Farshad (Hadi Ka-Koush), uno de esos secundarios que claman por mas minutos en pantalla y que es imposible que no se gane un hueco en el corazón del espectador, que ha de ver como el mundo de la persona a la que aprecia y trabaja se viene abajo y como esta se va autodestruyendo poco a poco. Por el aprecio que le tiene, por lo que le duelen sus forma de actuar.
Son sus personajes y los actores que les dan vida en pantalla uno de los grandes aciertos de 'Cuando el polvo se asienta' ('Når støvet har lagt sig'). Todos los personajes tienen su evolución. No son caricaturas, no están limitados por los tópicos. Algunos se mueven de la empata al odio, para otros aceptar las consecuencias de un decisión supone que su mundo se desmorone ante sus ojos sin poder impedirlo. Y eso afecta a la forma en la que el espectador ve la serie, en su posición con respecto a estos. Y sobre todo, hace que nos planteemos la pregunta de cómo actuaríamos nosotros después de un hecho tan traumático.
También es importante la historia, que se cuece a fuego lento. Lo importante no es el atentando sino como este afecta a las personas, como estas se enfrentan a la perdida, a las heridas, a las decisiones. Y como tal, ese momento, ese ataque terrorista, llega pero avanzados los episodios. Aún así puede que algún momento pueda resultar un tanto forzado (Estar ante una especie de 'Short cuts o 'Magnolia'' donde todos los personajes acaban conectados de una manera u otra mas allá del atentado puede ser para muchos excesiva), que algunos de los personajes acumule tal cantidad de dramas que para algún espectador pueda resultar excesivo, que algunas ideas mostradas ya se vieron antes en cintas como 'Fuerza Mayor' ('Force Majeure') y aquí vuelven a ser analizadas, sin la necesidad de ese epilogo de la cinta de Ruben Östlund que aunque quería aportar un nuevo punto de vista, servía para de alguna manera prostituir el mensaje que hasta ese momento había lanzado su director.
'Cuando el polvo se asienta' ('Når støvet har lagt sig') es sin duda una de las mejores series que actualmente se pueden ver en la plataforma filmin. Te deja noqueado, te emociona, consigue que los personajes y sus dramas te lleguen, que te resulten familiares. Pero siempre hay algo de esperanza, siempre hay personas que te van a entender, que te van a ayudar a abrir los ojos, a expresar tu dolor, a seguir poco a poco adelante. Sin duda alguna 'Cuando el polvo se asienta' ('Når støvet har lagt sig') es una serie imprescindible.
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